1-¿Cuándo comienza realmente la recuperación de cualquier adicción?
Cuando canalizamos la energía que antes invertíamos en practicar nuestra enfermedad hacia nuestra recuperación.
2- Tratar de recuperarse sin ayuda y sin fé es como subir una colina empinada caminando hacia atrás y con tacones latos.
3-La adicción no es la que causa en primer lugar los problemas de una persona, relación o una familia. Simplemente exagera los ya existentes.
4-La resistencia a participar en un programa de recuperación tiene más que ver con nuestra ilusión de control que con el temor de llegar a depender de una fuente de ayuda.
5-Cuando hayas perfeccionado la capacidad para estar seren0/a, la necesidad de escape será menos apremiante.
6-La gente no deja de ingerir alcohol u otras drogas en exceso o la co-dependencia en una relación, para hacer felices o complacer a los demás.
7-Si lo que nos estamos haciendo a nosotros mismos realmente diese un buen resultado, entonces no necesitaríamos recuperarnos.
8-Cuanto menos necesitemos recibir de nuestra pareja, más capaces somos de elegir a alguien que no esté tan necesitado de sojuzgar, de depender de, de manipular.
9-En el acoso sexual hay un elemento predatorio, un deseo de subyugar a otra persona por medio de la propia capacidad de atracción sexual.
10-La ira, el odio, el resentimiento por alguien, nos atan a esa persona con lazos de hierro. Estos sentimientos reprimidos nos enferman a nosotros mismos.
11-La recuperación siempre será un proceso nunca un producto terminado.
12-las mujeres maltratadas física o psicológicamente llevan una furia interna siempre reprimida, que ya estaba presente y encendida mucho antes de que existiera la relación de pareja actual. Esa furia es la consecuencia del maltrato en la niñez, cuando no se tiene capacidad para defenderse o protegerse. A veces se canaliza maltratando a su vez a los hijos.
13-aprender a estar en paz contigo y a curarte te salvará la vida.
14-¿Puedes decir con sinceridad que todos tus intentos para cambiar o mejorar a otros, no te han distraído del trabajo que has debido hacer contigo misma/o?
15-la cultura imperante tiende a “disfrazar” y a promover las adicciones, para que parezcan una libre elección más que la compulsión que en realidad son.
16-Cada recuperación es nada menos que un milagro.(Tiene la belleza de).
17-Los secretos que cargamos nos enferman más.
18-Cada persona adicta desearía creer que lo que le ocurrió en su infancia no tuvo realmente consecuencias tan graves.
19-Debemos aprender a amar y a atesorar a la criatura que fuimos y al adulto que hoy somos.
20-Si sospechas que fuiste víctima de incesto, es probable que lo hayas sido.
21- 1ro la persona toma la bebida La persona usa la droga
2do la bebida pide a la bebida La droga pide más droga
3ro la bebida se toma a la persona La droga consume a la persona
22-En nuestro carácter de adicto/as a las relaciones o a sustancias, en vías de recuperación, nuestra sobriedad o recuperación, no pude medirse sino por el grado de serenidad que logramos.
23-La clave de la recuperación reside en dejar de practicar la adicción en primer lugar y, luego, empezar a hablar de ella, y no a la inversa.
24-No hay ningún camino “más fácil, más suave” en la terapia. La sobriedad o el discernimiento sigue siendo el primer paso necesario.
25-La información sola, por alarmante que resulte, simplemente no basta para detener la adicción.
26-“La lección más importante que he aprendido en mis 15 años como terapeuta ha sido aprender qué el terapeuta no puede hacer el trabajo por le persona”.
27-El adicto/a que no se recupera, simplemente se autodestruye.
28-Amarte a ti mismo/a lo suficiente para liberarte de la adicción es un requisito indispensable para amar a otra persona.
29-Está en la naturaleza de las personalidades adictivas el minimizar la gravedad que ha adquirido su situación.
30-Estar dispuestos a aprender una nueva forma de vida más sana integralmente, a un día por vez, es mucho más productivo a la larga, que esforzarse demasiado por avanzar muy rápido.
30-Aún no he descubierto una conducta poco abierta y afectuosa entre seres humanos que no tenga sus raíces en el miedo.
31-Convertimos a la relación en una verdadera religión, y colocamos a sus pies las más grandes cargas que implica el hecho de ser humanos.
32-Cuando se trata de adicción y coadicción, debemos comprender que las personas sólo cambian cuado el dolor aumenta lo suficiente.
33-Cuando cualquiera de nosotros se brinda sin cesar a otra persona, en realidad se trata de un soborno no reconocido.
34-Cuando las personas se dedican con sinceridad a su propia recuperación, se vuelven reservadas.
35-En la recuperación conservar el aplomo , el autocontrol, se convierte en una prioridad mayor que el hecho de despertar lástima o de buscar la revancha.
Compilación: Mariana Fernández de Maura.M.ED
Centro de Desarrollo Humano
(809) 472-1589
Bibliografía: Norwood, Robin “Cartas de las mujeres que aman demasiado”.Javier Vergara Editor.Argentina,1998.
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