Un "corazón roto" y la necesidad del consuelo para el alma.

Nadie debería amar tanto que la falta de la otra persona la destruya. Un amor así no nace del alma, nace del ego y sus absurdos apegos posesivos.Cada relación tiene su tiempo debajo del cielo.Algunas serán por un trecho del camino, otras durarán muchos años, otras un breve instante.Cada ser humano debe enfrentar al final de la jornada la experiencia de la muerte cuando debe  abandonarlo todo y a todos, y sólo debe partir hacia otra dimensión, pues en el universo de Dios nadie es dueño de nadie

No obtsante las nuevas investigaciones cerebrales revelan que la misma parte del cerebro que procesa el dolor físico también se encarga de procesar el dolor emocional. Y esto explica, afirman los expertos, porque  mucha gente nunca se recupera de una herida emocional.

Muchas personas que han experimentado este tipo de dolor extremo a menudo hablan de "un dolor en el pecho", "un vacío debajo del esternón", o de un dolor por la región del bazo ,como cuando uno se extenúa corriendo demasiado, otros llegan a pensar que se están volviendo locos por tanto dolor.
El proceso de recuperación es paulatino, la persona atraviesa por un proceso de duelo que va por etapas.

Con cierta frecuencia debo recurrir a la combinación de las Flores de Bach para el "corazón roto".Pues en algunos casos el impacto emocional es tan negativo y lacerante que se necesita recurrir al bálsamo consolador de las esencias flores para restaurar  ese sistema nervioso drenado y  fortalecerlo para que puedan   levantarse literalmente del suelo y poder recobrar la alegría de vivir.